Marketing editorial. Qué decide el autor y qué la editorial

Una vez que una editorial ha decidido apostar por una obra, y antes de que esta salga a la luz, existen una serie de aspectos directamente relacionados con el marketing en los que, como autores de nuestra obra, debemos intervenir.

La elección del título

El título es uno de los elementos más susceptibles de cambio durante el proceso de edición y publicación de un libro. Si bien cuando presentamos nuestro manuscrito a la editorial normalmente ya tenemos decidido su título, es muy frecuente que, guiándose por su conocimiento del mercado, el editor nos haga una contrapropuesta. En este caso, lo prudente es que no te muestres cerrado, que escuches los argumentos que sustentan el cambio, que los enfrentes a los propios, que busques la opinión de terceras personas cualificadas o incluso de aquellas personas que conozcas y cuyo perfil concuerde con el de los lectores potenciales de tu obra, y que solamente entonces decidas.

El título tiene que ser atractivo. En un entorno tan saturado como es el de la industria editorial, el título es un anzuelo que llama la atención del lector y consigue visibilizarnos en medio del resto de obras. Puede ser corto o largo. Lo importante es que llame la atención del lector y que, a la vez, le cree expectativas o le dé pistas acerca de lo que va a encontrarse en el libro.

La participación en la elección de la cubierta

Digo participación en la elección porque, a diferencia de lo que sucede con el título —cuya elección recae en el autor de manera que el editor únicamente puede sugerir—, en el caso de la cubierta es el editor quien elige su diseño y el autor quien debe limitarse a hacer sugerencias y recomendaciones.

La mayoría de editoriales, por cortesía —porque como digo al final la elección es unilateralmente de ellas—, suelen mostrarle al autor las diferentes pruebas que van haciendo. En este sentido, y si lo que te enseñan no te gusta, debes aprovechar para aportar cubiertas de otros libros, fotografías o cualquier referencia que sirva para ejemplificar lo que querrías. Quizás no sirva de nada o quizás logre convencer al editor. En cualquier caso, lo importante es participar activamente en el proceso y no limitarse a decir  “me gusta” o “no me gusta”.

Ten en cuenta que la elección del diseño de la cubierta es uno de los aspectos más conflictivos del proceso de edición y publicación de una obra, pues mientras que el autor busca evocar con imágenes el contenido del libro, casi tratándolo como a un hijo, el editor lo trata como producto, y entiende por tanto la cubierta como reclamo comercial, priorizando una estética atractiva a la concordancia entre portada y contenido (y más aún a la subjetividad con la que concuerdan en la mente del autor).

La redacción de la biografía

Como todos sabemos, en la parte posterior o la solapa de un libro viene impresa, además de una reseña de la obra, una breve biografía del autor. Pues bien, en general la editorial encarga al propio autor la preparación de ese texto. Por tanto, aquí tienes una estupenda oportunidad para presentarte al lector con todo el carisma de que seas capaz. Si tu vida o tu trayectoria académica o literaria no son glamurosas, no te preocupes. En una época en que la transparencia de Internet lo pone todo al descubierto, inventarse otra identidad más brillante es muy peligroso. Lo mejor que puedes hacer es ser sincero sin perder la elegancia y la personalidad.

La elección de la foto de autor

También a veces la editorial le pide al autor una foto para agregarla a esa parte posterior del libro (hablo de parte posterior, y no de contraportada, porque realmente la contraportada es otra parte del libro y no el detrás. Si quieres conocer la anatomía y las diferentes partes que componen un libro, lee el artículo La estructura de un libro). En este caso, es importantísimo escoger una imagen de calidad y evitar la cara de circunstancias, las sonrisas forzadas y los brazos cruzados. Preséntate de forma cercana y amable. Nada de instantáneas más o menos fidedignas. Lo más aconsejable es que acudas a un profesional para que te retrate. Si lo haces así, deberás hacer llegar su nombre a la editorial para que aparezca su figura en los créditos del libro.

Evidentemente, también serán determinantes para la estrategia comercial de la obra otros elementos del diseño editorial tales como el tacto y color de las páginas, el cuerpo de la letra, el número de caracteres por línea, el interlineado o el formato mismo del libro. En ese caso, también lo decidirá la editorial.